Carta publicada el viernes 6 de octubre de 2023 por El Mercurio.

Señor Director:

Octubre es el mes de la prevención del cáncer de mama. Un gobierno que se presenta como feminista debiera estar particularmente atento a orientar sus políticas públicas en aquellas materias donde son las mujeres las principales desaventajadas.

Un estudio de The Lancet, aludido por este medio el domingo pasado, apunta a la desigualdad de género que existe a nivel global en el tratamiento del cáncer. Dicha investigación señala que, debido a múltiples factores, las mujeres no acuden oportunamente a realizarse exámenes preventivos y tratamientos terapéuticos. Entre las razones destaca la tendencia a relegar su propia salud debido a su rol de cuidadoras. Esto es particularmente crítico en los casos del cáncer de mama y cervicouterino, donde un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia.

En nuestro país, con más de 70 mil Garantías Explícitas en Salud (GES) retrasadas, este tema es especialmente relevante, ya que el cáncer de mama y el cervicouterino encabezan las listas de espera. En lo inmediato, es esencial contar con un sistema actualizado y claro de registro de pacientes que permita una priorización para quienes la espera puede significar menos tiempo de vida.