Carta al director publicada el domingo 4 de octubre de 2020 por La Tercera.

Señor director,
Las impactantes imágenes del viernes levantaron un clamor por una refundación de Carabineros. Muchas voces piden una refundación de la policía uniformada, para que podamos diseñar la institución desde un “momento cero”. A pesar de la tentación del inmediatismo, los momentos críticos requieren de una reflexión aún mayor.

La idea de refundación, atractiva por lo demás, omite ciertas complejidades y preguntas del proceso. ¿Qué sucede con los efectivos en el intertanto? ¿Podemos cambiar la cultura policial exclusivamente por medio de una reforma? ¿Conocemos realmente las causas de la crisis? ¿Se puede reformar si la clase política es incapaz de llegar a consensos? ¿Podemos prescindir de los carabineros actuales, que tarde o temprano deberán aplicar la reforma? Por último, y entre muchas otras, surge la pregunta por la manera en que se ejerce la autoridad por parte de Carabineros, en tiempos en que el poder mismo está bajo severos cuestionamientos. Esta, quizás, engloba a las anteriores. En suma, ningún cambio estructural, por indispensable que sea, reemplazará las prácticas y conductas adecuadas.

Como se ve, todas estas preguntas exigen una reflexión acuciosa, y respuestas tanto del poder político como de la propia institución. Solo con una aguda comprensión de los problemas que aquejan al uso de la fuerza (que, como decíamos, implica procesos sociológicos anteriores a la crisis de la policía), se podrá reconstruir la relación de Carabineros con la sociedad.